La Fiscalía peruana ha endurecido su ofensiva judicial contra Keiko Fujimori. Este miércoles, el equipo del caso Lava Jato solicitó 35 años de prisión para la excandidata presidencial, por su presunta implicación en los delitos de organización criminal, lavado de activos, obstrucción a la justicia y falsa declaración, relacionados con el financiamiento ilícito de sus campañas de 2011 y 2016.
La acusación forma parte de una nueva presentación del ‘caso cócteles’, luego de que el juicio oral anterior fuera anulado en abril pasado. Además de Fujimori, fueron incluidos otros exdirigentes fujimoristas como Jaime Yoshiyama, Pier Figari y Ana Herz, así como su exesposo Mark Vito Villanella y la empresa MVV Bienes Raíces, como persona jurídica.
Con esta nueva ofensiva, la Fiscalía busca llevar a juicio uno de los casos más emblemáticos de presunta corrupción política en Perú.
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