Cañete Vibra con Profesión Perpetua de la Hermana María Cruz
La serenidad del Monasterio de las Madres Carmelitas Descalzas en Cañete se vio irradiada por una profunda alegría durante la celebración de la solemne profesión de votos perpetuos de la Hermana María Cruz Del Niño Jesús de Praga. La conmovedora ceremonia, que culminó con la significativa imposición de su sagrado velo, representó la entrega definitiva del alma de la Hermana a la orden y la consagración plena de su existencia a Dios. Este trascendental evento público subraya la esencia de la vida de las Carmelitas Descalzas, dedicadas a la contemplación y a un vínculo íntimo con el Señor.
Con un corazón lleno de fe, la Hermana María Cruz pronunció sus votos de pobreza, castidad y obediencia, manifestando así su inquebrantable compromiso con los pilares de la espiritualidad carmelita. Su decisión de vida es un testimonio elocuente de la búsqueda constante de la unidad con lo divino a través de la oración ferviente y una existencia contemplativa.
La familia García Leiva y sus padrinos no pudieron ocultar su profunda emoción ante este hito crucial en la vida de la Hermana María Cruz, extendiendo una cálida invitación a toda la comunidad de Cañete para unirse en oración por el surgimiento de nuevas vocaciones dedicadas al servicio de nuestro Padre Dios, bajo la guía amorosa de la Virgen del Carmen.
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