La familia «Plata Como Cancha» afianza su trono político. Según las redes – singular personaje está donde, está – por su olor a santidad, honestidad, trasparencia, acentuado desprendimiento y entrega total en la búsqueda del bien común para los habitantes de la región
Si hay alguien que entiende cómo mantenerse en la cima, ese es Ramón Aldave Sotelo, ahora oficialmente el gran patriarca de Alianza Para el Progreso (APP) en Lima Provincias. Su inscripción en el ROP del JNE el 10 de julio de 2024 no solo lo pone en la fila para una curul en el Congreso 2026, sino que sella la consolidación de una dinastía política con aroma a eternidad en el poder.
Pero no está solo en esta cruzada. La gobernadora Rosa Vásquez Cuadrado y sus siete fieles consejeros también han asegurado su lugar en el barco de APP, dejando claro que aquí no hay sorpresas, solo estrategia. ¿Renovación? No, gracias. Aquí se habla de continuidad, de estabilidad… o de enquistamiento, según el cristal con que se mire.
Aldave Sotelo, apodado “El Papá de los Pollitos” en el Consejo de Lima Provincias, parece haber encontrado la fórmula infalible para la permanencia: lealtades bien tejidas y un partido que lo respalda con firmeza. Mientras algunos aplauden su «compromiso con el bien común», otros ven en su ascenso una muestra más del reciclaje político que tanto indigna a los ciudadanos.
¿Será esta la jugada maestra de la reelección o el capítulo final de una era?
