Contraloría detecta aparentes irregularidades en la municipalidad distrital de Quilmaná/Cañete.
Según el ente de control, la gestión del alcalde Regis Víctor Pomalaya, ocultó información pública, que estaba en la obligación de publicar y difundir, para conocimiento y fiscalización ciudadana
Que la transparencia en la gestión pública establezca un diálogo honesto y responsable entre el Estado y la sociedad, para construir acuerdos orientados a enriquecer y mejorar la ejecución de las políticas públicas, para no importar en la gestión del alcalde de Quilmaná – Regis Víctor Pomalaya Godoy.
Al menos-así lo deja entrever la Contraloría General de la República, luego de observar que la comuna edil (gestión 2023 – 2026), ocultó información pública, que estaba en la obligación de publicar y difundir, para conocimiento y fiscalización ciudadana.
Según el informe del ente de control del Estado peruano, la administración Pomalaya Godoy, la municipalidad distrital de Quilmaná, no registró en el Sistema Electrónico de Contrataciones del Estado SEACE, 155 órdenes de compra y mil novecientos veinticinco 1925 órdenes de servicio por montos iguales o inferiores a ocho (8) unidades impositivas tributarias, emitidas del 1 de enero al 31 de agosto de 2023; lo cual limita el acceso a la consulta ciudadana, el ejercicio del control social de las actividades y acciones de los funcionarios y servidores públicos, así como, la supervisión y control que puedan ejercer otras entidades, respecto al uso correcto de los fondos públicos.
Tras estos hechos, la Subgerencia de Prevención e Integridad (e) de la Contraloría General de la República, notificó al alcalde Regis Pomalaya, la existencia de hechos con indicio de irregularidad, es decir – actuar de forma contraria a las disposiciones legales, disposiciones internas y las estipulaciones contractuales establecidas, afectando la integridad, transparencia, continuidad o resultados de los procesos e intervenciones públicas en esa comuna.