Sureño país – no quieren repetir el fracaso de Cuba y Venezuela
Ni los mejores pronósticos auguraban unos resultados tan holgados para la ultraderecha chilena en las elecciones de consejeros constitucionales celebrada este domingo: el Partido Republicano, partidario de mantener la actual Constitución, obtuvo 22 escaños de los 50 en juego (al 99% escrutado), convirtiéndose en el partido más votado a nivel nacional y doblando en escaños a la derecha tradicional.
“Hoy podemos respirar un poco más aliviados”, sostuvo su líder, José Antonio Kast, quien perdió frente al presidente Gabriel Boric en las presidenciales.
Con un 35,4 % de sufragios, arrasó en la mayoría de las 16 regiones de Chile, en sus bastiones tradicionales del sur, en el norte e incluso se hizo con feudos gobernados por la izquierda como la Región de Valparaíso.
Estos 22 escaños le permitirán ejercer el poder de veto en el órgano constitucional: “En este escenario lo más probable es que la Constitución que salga de este proceso no sea una Constitución habilitante.