Según datos del INPE, los costos de la prisión del expresidente, se han ido multiplicando a lo largo de los años
El expresidente Alberto Fujimori, quien cumple una condena de 25 años de prisión por hechos de corrupción y crímenes contra los derechos humanos, según los entendidos, es «el preso más caro» de Perú.
Mientras las cárceles de Perú se encuentran entre las más sobrepobladas de América Latina, hay una exclusiva prisión en la que vive un solo reo. Un informe de la Unidad de Planeamiento y Presupuesto del Instituto Nacional Penitenciario (INPE), revela que el espacio que ocupa el ex mandatario, no tiene celdas; cuenta con tres estancias, biblioteca, un taller para pintar, una cocina, sala de reuniones, enfermería e, incluso, un huerto.
En comparación, el presupuesto utilizado en Alberto Fujimori es mucho mayor al utilizado por la Base Naval del Callao, donde se encontraba el exasesor presidencial Vladimiro Montesinos y los terroristas Abimael Guzmán, Óscar Ramírez Durand ‘Feliciano’ y Eleuterio Flores Hala ‘Artemio’, entre otros.
Para mantenerla y cuidar de su único preso (Alberto Fujimori), solo en 2020, el gobierno invirtió unos US$172.000 dólares, una cifra 57 veces mayor que la cantidad que destinó de forma individual para el resto de los presos en otras penitenciarías comunes.
Todos los gastos del penal son exclusivamente para el cuidado y el resguardo del expresidente, así como para la mantención de su seguridad, salud, alimentación, atención médica, entre otros aspectos más. Debido a la pandemia, los gastos en su presupuesto, según conoció, tuvieron un incremento para su cuidado.
«Un alto criminal que cometió graves delitos desempeñando un alto cargo público, como el de la presidencia de la república, no debe tener un tratamiento diferente a otros criminales», dijo el ministro de Justicia Aníbal Torres a una radio local al referirse al polémico tema de un posible traslado de Fujimori, hacia un penal común.