Tras violenta agresión contra trabajadora de municipal, director del “Al Rojo vivo”, se preguntó si en la PNP y el Ministerio Púbico, hay un morbo o tienen alguna suerte de sentimiento reprimido, de esperar ver a una mujer morir, para recién actuar
¿Cómo es posible que un desadaptado agreda a una mujer de forma tan violenta y no pase nada? – se preguntó el director del magacín periodístico “Al rojo Vivo” – Vladimir Rojas Hinostroza, al cuestionar la conducta asumida por la Policía Nacional del Perú (PNP) y el Ministerio Publico, de dejar en libertad al sujeto que atacó a la trabajadora municipal – María Cayahuallpa la noche del último domingo.
“Que paso señores de la Policía Nacional, que pasó señores del Ministerio Público, que paso señores del Centro de Emergencia Mujer, tanta propaganda, millones de soles que se tiran al año en publicidad en contra de la violencia; contratan artistas para hacer spot de denunciar la violencia, cuando al final botan a los agresores”, comentó – Rojas Hinostroza desde su plataforma informativa.
A su turno – María Cayahuallpa – declaró desconocer cuales son los procedimientos policiales, cuando se produce de una agresión tan violenta, como la que le toco vivir hace unos días. “Lo único que, si tengo conocimiento que, pese a las evidencias, mi agresor ya está en libertad”, manifestó – tras agregar que física y psicológicamente, está muy afectada.
Finalmente – no dejo de refreírse a lo decepciónate que es la administración de justicia en un país como el Perú, donde el trato hacia la agredida, no es el mejor. “Estas autoridades creo, tienen madres, tienen hijas, tienen hermanas y no les gustaría defectivamente, que a estas personas les sucede, lo que yo he vivido”, continuó diciendo, tras revelar que al momento de sus declaraciones, la Policía la sentó junto a su agresor, aduciendo que simplemente no había más espacio, además de hacerla esperar de 10.30 de la noche hasta después de las 2.00 de la mañana.
Tras estos hechos, el director de “Al Rojo vivo”, culminó su comentario, preguntándose si en la Policía Nacional y el Ministerio Público, hay un morbo o tienen alguna suerte de sentimiento reprimido, de esperar ver a una mujer morir, para recién actuar.