Delictiva conducta del personal sanitario, ya genera indignación entre la mayoría de peruanos.
Los falsos héroes-no solo son déspotas en su trato. ¿Ahora les roban las vacunas a los adultos mayores?
El proceso de vacunación contra el COVID-19 en América Latina, que ya tenía problemas por su lentitud y desigualdad, se ha visto empañado por el otro virus endémico que afecta a la región, y al que parece no ser inmune: la corrupción.
Los casos de ‘jeringas vacías’, que fueron un escándalo en países como México y Brasil, se han presentado también en el Perú, lo que ha generado la indignación de autoridades del Gobierno, empezando por el presidente Francisco Sagasti.
En un video que circuló en redes sociales se ve que una persona espera, en el interior de su vehículo, que un enfermero le coloque en el brazo la vacuna, sin embargo, el acompañante de la mujer se percata que, supuestamente, en la jeringa no había la dosis, por lo cual reclama y el personal de salud regresa a su módulo para recargar la jeringa.
Uno de estos casos es el de la señora Margarita Moreno (72), quien acudió el pasado 30 de abril al estadio Los Chancas de Andahuaylas, en Santa Anita, para recibir su primera dosis de la vacuna. La acompañó su hija, quien en su emoción por ver a su madre siendo inoculada grabó el proceso y fue ahí cuando notó que la jeringa estaba vacía. Ella ya había asistido al proceso de inmunización de su padre, por lo que se percató de la diferencia y reclamó.
El Ministerio de Salud había informado en un comunicado que investigarían estas denuncias. Señaló que se están intensificando las medidas de vigilancia y control, ante estos casos y, de encontrarse algún acto indebido, se aplicará las sanciones correspondientes.