Autoridades municipales y policiales están sordas, ciegas y mudas
En lo que a transporte y seguridad vial se refiere, los discapacitados gozan de los mismos beneficios que el peatón, cuentan con asientos reservados en el transporte público, así como rampas y estacionamientos especiales en la vía.
Sin embargo, muchas veces no se actúa adecuadamente y no se respeta el derecho de las personas con discapacidad al momento en que se movilizan en la calle.
Desde su cuenta personal de Facebook, el ciudadano Gastón Baca Garro – no dudo en hacer público su malestar por el hecho de que nadie-respete las rampas de acceso para las personas con discapacidad de la Plaza de Armas de la ciudad de San Vicente de Cañete.
“Señor excelentísimo alcalde, me puede venir ayudar para poder cruzar la pista. Hasta cuando estaremos en esta situación. No hay principio de autoridad”, dijo – tras dejar entrever que se está haciendo costumbre observar todos los días que las rampas para personas discapacitadas están siendo obstaculizadas por motocicletas.